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domingo, 20 de noviembre de 2016

Consulta al dentista según clase social y tipo de aseguramiento (EESE)

Esta entrada es una colaboración de Félix Fernández Bermejo, salubrista del Servicio Extremeño de Salud. Félix ha tenido la amabilidad de acceder a mi sugerencia de prepararla. Es un auténtico lujo presentarla aquí y quiero agradecerle públicamente el esfuerzo realizado. Mi participación en ella ha sido meramente de edición con el objetivo de mantener en lo posible la estructura de las entradas dedicadas a la EESE 2014 y la complementación de la misma con los datos referidos al tipo de aseguramiento.



La renta y otras condiciones sociales influyen en mayor o menor medida en todos los aspectos de la salud que aborda la Encuesta Europea de Salud en España 2014 (EESE). En esta entrada se les dedica una especial atención puesto que la odontología es la actividad sanitaria en la que la sanidad pública ha penetrado menos, sobre todo en mayores de 15 años, por lo que ha quedado más dependiente del libre mercado. En estas condiciones, el poder adquisitivo podría ser un claro condicionante de la distribución de la oferta y también de su utilización.




Las preguntas

Las preguntas que indagan sobre esta cuestión son la nº 62, nº 63, nº 64 y nº 65 del Cuestionario de Adultos.



Tiempo desde la última visita al dentista
Para ver como las condiciones sociales influyen en el acceso a la odontología, basta ver cómo se distribuye la frecuencia de visitas al dentista según clase social según la propia EESE que se muestra en el gráfico siguiente.


A pesar de que la cobertura odontológica es muy desigual entre las distintas CCAA (1), el patrón global de uso parece estar condicionado por las reglas de un mercado, que tiende a adaptarse a la capacidad adquisitiva de la población. Así, el patrón geográfico de uso de las CCAA es casi superponible, o inverso según el caso, al que muestran indicadores que aproximan la capacidad de compra de la población de cada CCAA. Se ha seleccionado la clase social procedente de los propios microdatos anonimizados de la EESE y la renta anual neta media de la Encuesta de Condiciones de Vida de 2014 del INE (2). La oferta disponible de cada CCAA la obtenemos del INE: tasa de odontólogos colegiados no jubilados por 100.000 habitantes en cada CCAA. Los resultados muestran un gradiente noreste – suroeste muy marcado.



Y aunque la correlación nunca es exacta, los gráficos de dispersión que siguen muestran la fuerte asociación que tienen entre si estas variables. Así Extremadura y Castilla la Mancha se mantienen en el extremo de menor uso, mientras que Madrid y País Vasco lideran el extremo opuesto.

La oferta de las CCAA (aproximada por la tasa de dentistas) se distribuye también según capacidad de compra de la población de éstas (aproximada por la clase social).




Dependencia funcional del dentista consultado
No sorprende por tanto que, dado que la cartera asistencial pública (gratuita) solo cubre determinadas actuaciones (limitándose en la práctica a sólo las urgencias), y representando menos del 10% de toda la atención dental de los mayores de 15 años, la oferta pública esté prácticamente copada por las clases bajas, con poco poder adquisitivo. Mientas que las clases altas copan las sociedades médicas y acuden claramente más a la consulta privada. De hecho, al analizar la asociación entre la opción pública y el peso en cada CCAA de las clases bajas, el gradiente sigue siendo muy fuerte.




Motivo por el que se acude al dentista
El motivo por el se acude al dentista también está claramente condicionado por el poder adquisitivo. Y eso que estas preguntas se hacen únicamente a quienes han acudido a consulta alguna vez; y la decisión de acudir al dentista ya filtra en parte a las clases bajas. Así, las clases altas acuden mucho más para tratamientos preventivos como revisión y limpieza, mientras las bajas van sobre todo para quitarse las muelas. (Y para otros motivos de consulta menos frecuentes, como ortodoncias y sobre todo los implantes, el predominio de frecuentación por esos motivos de las clases altas también es notorio aunque no se aprecie bien en el gráfico).


En el ámbito de las CCAA, la relación entre el motivo de consulta y la clase social es también muy evidente para determinados motivos de consulta, destacando la extracción de un diente o muela como motivo de consulta y la clase social.


Esto sugiere que la población de escasos recursos retrasa la consulta al dentista hasta que se presenta un problema agudo que en muchas ocasiones acaba con la extracción de la pieza, recurriendo normalmente al dentista de la sanidad pública ya que ello es, prácticamente, lo único que ésta cubre en el caso de los adultos; por lo que el principal servicio que reciban las clases sociales más bajas será la extracción de piezas dentarias en mal estado.



Estado de la dentadura
Este comportamiento explicaría a su vez el peor estado general de la dentadura de las clases bajas, valorada sobre todo por la mayor frecuencia de las pérdidas de piezas dentarias y su no sustitución y la mayor frecuencia del sangrado de las encías, claramente asociado a la menor consulta para limpieza de boca.


De hecho, entre CCAA, el gradiente social también se mantiene por ejemplo en la prevalencia del sangrado de las encías.


Las comparaciones entre CCAA que mostramos en esta entrada son de datos brutos y las diferencias encontradas podrían estar influenciadas, además, por otros factores como la estructura etaria de la población, el nivel educativo, etc. Y que, como en este caso mostramos para la clase social, podrían ser fuentes de variabilidad incluso más importantes que la CCAA en donde se viva.


Tiempo desde la última visita al dentista y dependencia funcional de éste según tipo de aseguramiento




En concordancia con la mayor presencia de clases altas entre los mutualistas y los sujetos conseguros privados, la visita al dentista es menos frecuente en aquellos sujetos que tienen al SNS como único asegurador sanitario. Si bien la mayoría de los sujetos de este último grupo han acudido al dentista privado, la inmensa mayor parte de quienes acuden al dentista de la sanidad pública son sujetos que tienen como único asegurador sanitario al SNS. Es decir, la visita al dentista de la sanidad pública por parte de los mutualistas y de quienes disponen de seguros privados de asistencia sanitaria es meramente testimonial.


Bibliografía

1.- Cortés Martinicorena F, Cerviño Ferradanes S, Blanco González J, Simón Salazar F. Informe sobre los Servicios de Salud Bucodental en España. Situación de las Comunidades Autónomas, 2013. RCOE Rev DEL Ilus Cons Gen COLEGIOS ODONTÓLOGOS Y ESTOMATÓLOGOS ESPAÑA. 2014;19(Supl. 1):12-42. Disponible en: http://www.consejodentistas.es/comunicacion/actualidad-del-consejo/publicaciones-del-consejo/revistas-del-consejo/revista-rcoe/item/900-revista-rcoe-octubre-2014-vol-19-supl-1.html

2.- INE. Encuesta de condiciones de vida. Resultados por comunidades autónomas. Renta anual neta media (año anterior a la entrevista). Inebase. 2015.  Disponible en: http://www.ine.es/dyngs/INEbase/operacion.htm?c=Estadistica_C&cid=1254736176807&idp=1254735976608&menu=resultados&secc=1254736194793&padre=&capsel=1928

3.- INE. Tasa de Dentistas no jubilados por 100.000 habitantes por Comunidades y Ciudades autónomas de colegiación y situación laboral. 2015:Inebase. Disponible en: http://www.ine.es/jaxi/tabla.do?path=/t15/p416/a2014/l0/&file=s03006.px&type=pcaxis&L=0




4 comentarios:

  1. Muchísimas gracias de nuevo, Juan. Muchísimas gracias también por mostrar los trabajos de Félix Fernández Bermejo, del que he aprendido mucho para mejorar nuestras evaluaciones de evalmed.es.
    Galo Sánchez

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  2. Me parece importante subrayar que según los últimos datos de OCDE, el gasto público dental español está a la cola de dicha organización mundial, y eso que buena parte del mismo se canaliza vía mutualidades de funcionarios.
    En este sentido, recordar que en la SS mutualista hay un incentivo por visitar al dentista privado, consistente en el reintegro parcial de la factura privada (endodoncias, prótesis, etc...), algo impensable en el SNS y que, aparte de contribuir a las desigualdades en salud, facilita pagos en B y todo tipo de fraudes al fisco por las consultas dentales privadas http://www.elmundo.es/sociedad/2016/02/16/56c2dbd1268e3e8f0b8b4628.html

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  3. Otra dramática entrada. Gracias a Félix y a Juan por recordarnos la crudeza de las desigualdades sociales en el acceso a la salud bucodental en España. Para abundar en lo dicho, recordar que cuando las clases sociales más bajas acuden al dentista privado, generalmente por falta de cobertura del procedimiento en la sanidad pública, recurren luego a la sanidad pública para que "les hagamos las recetas". En la consulta es el día a día de una connivencia (o parasitismo) de la que se beneficia la privada. Es una especie de copago indirecto.

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  4. Socializaron al médico de família pero no a la casta de los dentistas y a la casta de los farmacéuticos.Nunca hubo voluntad política de integrar a las mutualidades en el sistema nacional de salud. Ahora a mis pacientes los mando a una ONG que yo llamo dentistas sin fronteras. De vergüenza la atención bucodental en el SNS. No te entra ni una limpieza de boca ni un simple empaste. Si eres paciente diabético con enfermedad periodontal y no te puedes pagar el tratamiento o no eres mutualista te esperas uno o dos años y el dentista te quitarà las piezas y encima te reñirán por tu mal control metabólico de la diabetes.

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